Claros y oscuros de la nueva V Invasion extraterrestre

A mediado de los años 80's, en medio de la discusión de la efectividad de La Guerra de las Galaxias (el escudo de Ronald Reagan) ante un ataque nuclear soviético, se estrenaba en la tv la miniserie V invasión extraterrestre, que fue sin dudas un impacto televisivo pocas veces superado.

En aquella se contaba de como una raza de seres extraterrestres llegaban a la tierra desde el quinto planeta de la estrella Sirio en una flota de enormes platillos voladores que se estacionaban sobre las principales ciudades del mundo. Las intenciones superficiales eran la de colaborar con la tierra brindando tecnología y conocimientos a cambio de algunos productos químicos que necesitaban y que para nosotros no son de gran valor.

Las verdaderas intenciones son las de someter a la humanidad utilizándonos como alimento y carne de cañón en una guerra que los visitantes tienen con otra raza alienígena y robar toda el agua de la tierra.

El proceso es lento, al principio los extraterrestres son amigables y muy mediáticos. Pero lentamente un grupo de gente descubre que los visitantes no son lo que parecen y que poco a poco van tomando el poder del gobierno tornándose en una fuerza de ocupación sin que la gente se de cuenta.

Esta primera miniserie, o película larga si se quiere, tiene una especie de final en la que los extraterrestres son expulsados de la tierra terminando un ciclo con un buen presupuesto, una historia bien trabajada y actuaciones aceptables.

Luego vendría el segundo ciclo (o temporada) que en verdad era una bazofia por donde se la mire. Las historias eran autoconclusivas, los efectos especiales eran nulos (hasta les quitaron la reverberación de vos que los visitantes tenían en la miniserie) y la trama no llevaba a ninguna parte.

Lo mejor de esta temporada fue la promesa, que se nos hacia a los espectadores, de que posiblemente los enemigos de los visitantes llegarían a darles una mano a la humanidad, pero esto nunca sucedió.

También podemos rescatar la exhibición de curvas que mostraba la actriz Jane Badler vistiendo ajustadísimas prendas, a cual de todas más escotada, que en el fondo no le aportaban mucho.

Finalmente la serie fue cancelada sin pena ni gloria como era de esperar.
Ahora nos llega la nueva versión de esta vieja y (para muchos querida) serie con una visión mucho más moderna, seria y un tanto oscura, que mantiene muchos de los viejos clichés y también muchas de las viejas dudas.

Con tan solo 4 episodios emitidos diré que los realizadores van a tener que meter mucha mas leña en el asador de lo que han metido hasta ahora porque la cosa viene lenta y con algunos errores un tanto incómodos.

El argumento es básicamente el mismo que el de la vieja miniserie aunque ya no tenemos tan clara la apariencia nazi de los extraterrestres. Tampoco visten de rojo (amenaza comunista de los 80's) ni necesitan lentes y ni tan siquiera han mostrado arma alguna hasta el momento. Es que en realidad sabemos poco de ellos y mucho lo deducimos por la vieja serie.

Hasta el momento sabemos:
- Tienen una clara obsesión por manejar los medios de comunicación
- Tienen apariencia de lagartos (como en la otra) aunque solo le vimos el ojo a uno
- Tienen un dominio de la medicina mucho mas avanzado que el que tenemos nosotros
- Son capaces de enamorarse de un humano (esto es algo que no entendía en la vieja serie y menos ahora)
- Tienen un conflicto entre ellos como una especie de rebelión que le viene bien de bien a los humanos
- La líder de los visitantes, Anna, tiene cara de pícara.

Nos queda por ver si las incongruencias de la vieja serie se repetirán en esta, aunque por como viene la mano parece que si.

En la vieja serie por un lado teníamos que los visitantes eran unos lagartos con unas enormes cabezas trompudas, llenas de cuernos y protuberancias que nunca entendí, como coños, hacían para ocultar bajo el maquillaje de humano.

Los lagartos se enamoraban de los humanos tanto como los humanos se enamoraban de los lagartos, aunque estos estaban convenientemente maquillados como humanos porque como lagartos eran horribles.

Cuando estaban con sus caras humanas hablaban como nosotros y cuando estaban con sus caras originales de lagarto gruñían como bestias a pesar de que eran más avanzados y civilizados que nosotros.

Si bien la tecnología visitante era superior las armas de los mismos eran tan espectaculares como inefectivas. Todas las armas sin excepción (ya fueran grandes rifles o pistolas) disparaban un tiro cada 3 segundos. Me imaginaba, de más joven, con una ametralladora haciendo estragos en un ejército de estos visitantes.

Las naves, los legendarios huevitos, eran terriblemente lentos y carecían de cualquier sistema de lanzamiento de misiles o cosa por el estilo. Su frecuencia de disparo era igual de lenta y destructiva que una pistola extraterrestre.

Aparentemente, la mejor arma que tenían era una bomba en una de las naves nodrizas, lo que significaba que tenían que sacrificar una de sus grandes naves para destruir una ciudad
¡Ni siquiera podían lanzar la bomba como lo hizo EEUU con el vetusto Enola Gay en Hiroshima!

Y bueno, así fueron vencidos finalmente, por el maldito polvo rojo y un montón de globos aerostatitos que los extraterrestres fueron incapaces de derribar a distancia.

En la nueva serie a los lagartos todavía no le vimos la cabeza desnuda de piel humana, pero ya nos dejaron ver un ojo y un cachete tan horrible como el de los lagartos anteriores.

Se siguen enamorando, como ya mencioné antes, de los humanos y en el apartado armas tenemos una gran incógnita ya que aun no han dejado ver gran cosa, aunque lo poquito que se vio promete bastante más que toda la serie anterior.

Lo que si me dejó un sabor amargo que costara un par de muy buenos capítulos quitar, es un dialogo entre la protagonista Erica Evans (Elizabeth Michael) y uno de los visitantes rebelde que es algo así:
Después de una operación en conjunto el visitante rebelde siente que ella no confía en el así que, en el primer impasse, el le dice:

- Ok, no llegaremos a ningún lado si no haces tus preguntas, entonces hazla.
Aquí nosotros nos ponemos contentos porque ella hará las preguntas claves: ¿Por qué traicionas a los tuyos? ¿Qué pretenden de nosotros? ¿Cuál es vuestro plan?
Pero ella pregunta:

- ¿Que le ocurrió a Combs?
Combs es un rebelde que se suicidó ingiriendo una pastilla que todos los v llevan consigo, el le explica esto y dice:
- Siguiente pregunta.
¡Ahora si, ella le preguntara lo que esperamos saber todos!
- Te llamo traidor ¿Hay otros V como tu, que pelean contra Anna?
Siiiii!!!! Al fin!!!! ¿A ver que responde el?

Mirando a los lados para asegurarse que nadie mira le responde seriamente:
- Se llama la quinta columna
Crick, Crick, Crick
Ella dice a esto haciendo un gesto con la cabeza
- Es bueno saberlo
- Bien - responde el asintiendo
Se miran un momento y continúan con lo que estaban sin preocuparse más por el tema.

Y nosotros nos quedamos con eso preguntándonos: ¿como es posible que la mina se conforme con una respuesta tan escueta y poco explicativa? ¿¿¿Qué mierda es la quinta columna???? ¿¿Qué clase de rebelión es?? ¿Acaso se pelean por ver como invadirnos?

Este tipo de diálogos son los que nos hacen preguntar si los guionistas nos toman por entupidos o es que los entupidos son ellos.

En fin, una remake que tiene algunos aciertos, mucha expectativa y una promesa de mejorar que termina entusiasmando al finalizar de visualizar los 4 primeros capítulos (sobre todo en el ultimo).

Por mi parte, estoy extrañando tanto a Battlestar Galactica que puse muchas expectativas en esta nueva versión.

No puedo decir que me ha defraudado, pero tampoco me entusiasma mucho y eso que soy un fan vicioso de la ciencia ficción.

¿Por qué verla entonces?
Pues porque promete mucho. Pero claro que hay que ver si los encargados de la serie cumplen.
Esperemos y juzguemos al final.